Minivacaciones en Valencia
Aprovechando que entre Navidad y Nochevieja nunca se suele hacer mucha cosa y que no tenía que volver por el laboratorio hasta hoy mismo, Andrea y yo nos escapamos a Valencia tres días, y la verdad he vuelto sorprendido, ¡qué ciudad tan bonita!
Hemos aprovechado para ver la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un poco levantada en obras debido al Ágora (otra magnífica obra de Calatrava), el circuito urbano de Formula 1 y la zona del Puerto de la Copa América, pasear por el casco histórico y también por el cauce del Turia.
A la vuelta pudimos hacer una visita fugaz a Teruel donde también aprovechamos para comer unas Delicias de Teruel, es decir, jamón del rico, rico.
De todo lo que vimos destaco lo siguiente:
El Oceanográfico: Unas geniales instalaciones para albergar todas las diferentes especies de animales marinos y aves. El espectáculo del delfinario no hay que perdérselo, uno se queda con la boca abierta.
El Hemisfèric: Aquí me lleve un poco de decepción, no por el documental de Dinosaurios alive que vimos sino porque el cine en si no daba tanta impresión como creía que iba a causar.
Por cierto, hicimos la visita a los tres complejos el mismo día, mañana, tarde y noche respectivamente. Para ir a comer y cenar el centro comercial de al lado, Aqua, ofrece mucha variedad de comidas y precios.
Circuito Urbano de F1: Si eres fan de la F1 no puedes dejar de darte una vuelta. Cuesta un poco encontrarlo pero una vez allí puedes ver la zona de boxes, el paddock, la línea de salida, ¡¡¡incluso están aún las marcas de los neumáticos!!!
Casco histórico: Imprescindible hacer una visita y ver la Catedral, la Torre de los Serranos, el Miguelete... Y mejor aún irte de pintxos, que son muchos los bares que hay por allí.
En definitiva, que Valencia es una bonita ciudad, sin duda, un sitio con muchas cosas por ver y donde con un fin de semana no tienes suficiente, pero la próxima ya será en verano y con calorcito.
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